En sus púberes comienzos como bachero, Ansaldi le escuchó decir a su querido fallecido maestro, Angelito Analía Medina, que recién después de 30 años de oficio estaba captando de qué venía la cosa con esto de ser camarero. "Pobre tipo, desperdició su vida. Ser mozo es lo más fácil del mundo", pensó Ansaldi.
20 años después la vida lo pone en su lugar y le repite al gran Pez palo casi las mismas palabras de la tuerta Medina.
Esto es más complejo de lo que pensaba.
Después de un campeonato mundial de camareros ganado, de uno perdido, de 500 cursos de protocolo y ceremonial, de estudiar hasta el hartazgo la llave nelson de cierre de venta; y contando en su haber 1.000 cumpleaños de quince, 2.000 casamientos, 500 bar mitzvah, 400 famosos bien servidos, 4.000 calles cruzadas como mozo de calle, y de servir más de 1.000.000 de copas, Ansaldi aún sige volcando en el mantel esa maldita última gota que queda en el cuello de la botella de vino tinto. Y no hay lito que se le resista.
Obsérvese la correcta posición de piernas, símil esgrimista o aikidoka.
¡El mejor camarero del mundo! Asesoría profesional para camareros, mozos, meseros, garzones y saloneros. Porque no todo es sobre cantineros y cocineros.
lunes, 30 de agosto de 2010
sábado, 21 de agosto de 2010
Camarero profesional
El 98 % de los camareros no quieren ser camareros, quieren ser otra cosa: almaceneros, charcuteros, colectiveros, taxistas, porteros de edificios, jueces de línea, diarieros, torneros, municipales, etc.
Yo quiero ser camarero y eso casi que me convierte automáticamente en camarero profesional.
Pero, sentirse un camarero profesional no es suficiente, porque como en todo oficio, profesión o disciplina existen personas que hacen un buen trabajo y otros que no lo hacen tanto. Entre los camareros profesionales hay de todo: talentosos, borrachos, sacrificados, ignorantes, enfermos, ingenuos, alcahuetes. Si tú eres de esos mediocres que tienen diez años de camareros pero sueñan con ser kiosqueros, renuncia, renuncia o comienza ya mismo a capacitarte seriamente. Un camarero profesional es un vendedor y debe entrenar su cuerpo antes que nada. Y luego, después de tener pleno dominio de sus funciones corporales, comenzará con su capacitación teórica.
La temeridad y elegancia de un torero.
La flexibilidad y tozudez de un aikidoka.
La ductilidad y percepción de un actor.
Su escudo es una bandeja, el moño su corazón.
Diaadia.com.ar
Yo quiero ser camarero y eso casi que me convierte automáticamente en camarero profesional.
Pero, sentirse un camarero profesional no es suficiente, porque como en todo oficio, profesión o disciplina existen personas que hacen un buen trabajo y otros que no lo hacen tanto. Entre los camareros profesionales hay de todo: talentosos, borrachos, sacrificados, ignorantes, enfermos, ingenuos, alcahuetes. Si tú eres de esos mediocres que tienen diez años de camareros pero sueñan con ser kiosqueros, renuncia, renuncia o comienza ya mismo a capacitarte seriamente. Un camarero profesional es un vendedor y debe entrenar su cuerpo antes que nada. Y luego, después de tener pleno dominio de sus funciones corporales, comenzará con su capacitación teórica.
La temeridad y elegancia de un torero.
La flexibilidad y tozudez de un aikidoka.
La ductilidad y percepción de un actor.
Su escudo es una bandeja, el moño su corazón.
Diaadia.com.ar
viernes, 13 de agosto de 2010
martes, 3 de agosto de 2010
El camarero escritor
Otra impecable anécdota/lección de Maestro Ansaldi:
(Buenos Aires, 2002 )
(Estás cosas no se hacen, mis cumpas, un camarero nunca debe ser informal e irónico ante un cliente, pero cuando uno recién comienza es inevitable hacerlo. Traten de hacerlo poco, o nada)
http://spanish.argentina.usembassy.gov/evento_aguinis.html
(Buenos Aires, 2002 )
"Cerrando la cocina me aparece de repente Marcos Aguinis con otro. Rápidamente se sentaron, sin saludar. Voy al trote pues y les comunico la nueva, con una leve y respetuosa sonrisa: "Buenas noches y disculpen, mis excelentísimos, pero la cocina ya cerró. Los maestros ya se han retirado". El compañero de Aguinis me miró con odio y me dijó: "¿Vos sabés quien es él? Es Marcos Aguinis, el escritor". Entonces le estrecho la mano a Aguinis y le digo: "Miguel Ansaldi, y también soy escritor, escritor de comandas para la cocina. El más prolijo escritor de comandas. Y ahora dígame Marquitos, ¿a qué se dedica ? ya que como ve "escritor" es un término altamente ambiguo". Aguinis y su compañero me miraron boquiabiertos. Luego de unos interminables segundos Aguinis me respondió: "Soy neurocirujano". Le estrecho la mano nuevamente y le digo: "Mucho gusto, Miguel Ansaldi, mozo. No se preocupen, no se van a quedar sin comer. Ya mismo les preparo unos emparedados de jamón y queso y con mis propias manos. ¿Y para beber, qué desean?"
(Estás cosas no se hacen, mis cumpas, un camarero nunca debe ser informal e irónico ante un cliente, pero cuando uno recién comienza es inevitable hacerlo. Traten de hacerlo poco, o nada)
http://spanish.argentina.usembassy.gov/evento_aguinis.html
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